Cuenta una persona que se encontraba en un aeropuerto, presentando su pasaporte en la aerolínea que lo traería de regreso a su casa en el punto de chequeo esta persona no aparecía como tripulante en ese vuelo, al encontrarse con esta situación se sintió frustrado porque pensó que "no llegaría a casa". Este testimonio me recuerda a un suceso grandioso y ese es "El Libro de la Vida" en Lucas 10 Jesús envió a sus discípulos a una misión evangelistica, en su regreso ellos volvían contentos y rápidamente le trajeron buenas noticias de lo que había sucedido. Pero Jesús les dijo:"no os regocijéis de que los espíritus se os sujetan, sino regocijaos de que vuestros nombres estén escritos en los cielos". El enfoque de nuestro gozo no se debe a que tenemos éxito, sino de que nuestros nombres se encuentren escritos en el libro de la vida. Pero como podremos estar seguro de esto? La palabra de Dios nos dice, si declaras con tu boca, que Jesús es el Señor y lo crees en tu corazón y crees que Dios lo levanto de entre los muertos al tercer día, seras salvo (Rom. 10.9).
En el libro de Apocalipsis capitulo 21, el apóstol Juan hace una descripción de la Santa ciudad que espera a aquellos que han creído y confiado en Cristo Jesús. El escribe, que "no entrara en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero (v.27). El libro de la vida, es la manifestación celestial. Esta tu nombre inscrito en el?
Dos conceptos importantes aparecen en este tema en esta porción bíblica, Jesús es quien nos da autoridad para llevar acabo su trabajo aquí en la tierra; y Dios se encarga de inscribir nuestros nombres en el Reino de los cielos (v.20). Note que en ambos casos no es lo que logremos hacer, la Salvación es u regalo a través de la gracia de Dios nuestra parte es aceptar ese regalo.
Si te toco este mensaje haz esta oración: Amado Dios y Padre celestial, gracias por el regalo de tu Hijo amado Jesús,quien nos prometió que iría a preparar moradas para nosotros, gracias a ti también porque tu nos estas preparando para ese lugar.
Dios abre las puertas de los cielos a aquellos que abren sus corazones a el.